Se debe trabajar en la implementación de políticas laborales, que incorporen activamente la promoción de la salud, del bienestar emocional y la gestión del estrés, dentro de la seguridad y salud del trabajo; y, considerar aspectos ergonómicos, ambientes físicos y riesgos psicosociales.
Por Tania Guimac. 02 enero, 2023. Publicado en El Tiempo, el 19 de diciembre de 2022.
Pregunté a dos personas ¿Qué te viene a la mente con el término “empresas saludables”? Ambas coincidieron en decir “buena alimentación y ejercicios de relajación”. Entendí, que queda mucho por trabajar para ampliar el significado de la frase del título de esta nota. Y, es impresionante descubrir hasta dónde podría llegar, englobando un poco más de lo que ya se está haciendo en la gestión del talento.
Un entorno laboral saludable es aquel donde empleados y jefes participan activamente en un proceso de mejora continua, con el objetivo de alcanzar una visión conjunta para mejorar la salud, la seguridad y el bienestar de los trabajadores, así como la sustentabilidad del ambiente laboral. Consiste en la búsqueda de un bien favorable para todos los miembros que interactúan con la empresa, no solo se reduce a la alimentación.
En Europa, específicamente en España, está cobrando mucha fuerza, incluso, hay empresas que trabajan para ser certificadas como “empresa saludable”. Tras todas las secuelas en salud mental que ha dejado el COVID-19, han surgido otros desafíos a nivel organizacional, en la relación trabajador-empresa, por los indicadores elevados de enfermedades mentales; muchas de ellas, también originadas por el ambiente de trabajo.
Uno de los focos de la gestión del talento es crear empresas saludables, que fomenten trabajadores más sanos y organizaciones preocupadas por el bienestar físico y emocional de sus colaboradores.
En toda su plenitud, la frase empresa saludable involucra una serie de acciones relevantes que fomenten una cultura de participación y la identificación constante del grado de motivación y responsabilidad asumida con los colaboradores. Facilita, a nivel organizacional, el equilibrio del trabajo, dotado de empatía y sin llegar a límites poco manejables de estrés.
Se debe trabajar en la implementación de políticas laborales, que incorporen activamente la promoción de la salud, del bienestar emocional y la gestión del estrés, dentro de la seguridad y salud del trabajo; y, considerar aspectos ergonómicos, ambientes físicos y riesgos psicosociales. Todo ello representa un trabajo concatenado a nivel cultural, estratégico y político empresarial.
Para mantenerse en el tiempo, las empresas dependen, en gran medida, de que sus trabajadores estén sanos y motivados. La promoción de la salud en el trabajo juega un rol fundamental para enfrentar todos los cambios venideros de un mundo globalizado. Todas las empresas deberían apuntar al objetivo de “gente sana en organizaciones sanas”.
Y, en tu empresa, ¿se está fomentando el cuidado de la salud?
Este es un artículo de opinión. Las ideas y opiniones expresadas aquí son de responsabilidad del autor.
